De vez en cuando te llevas una alegría. Es lo que me ha ocurrido al saber que el Parlamento Vasco ha aprobado por unanimidad una resolución en la que insta al Gobierno Vasco a presentar en un plazo de seis meses una primera batería de propuestas dirigidas a reparar y reconocer a las denominadas víctimas de violencia de motivación política.
El principal contenido de la propuesta aprobada es un encargo a la Oficina de Atención a Víctimas del Gobierno Vasco para que complete el informe sobre víctimas de vulneraciones de Derechos Humanos derivadas de la violencia de motivación política. Este trabajo fue presentado por Jon Landa, director de Derechos Humanos del anterior gobierno, y representa un estudio riguroso que recoge las vulneraciones del derecho a la vida y a la integridad física y psíquica por intervención de las fuerzas de seguridad del Estado, grupos parapoliciales, ultras y otros.